La fotografía y los gatos son dos pasatiempos muy populares que se combinan de forma fácil y agradable. Muchas personas tienen una cámara DSLR o, en el peor de los casos, una cámara para el iPhone y un gato vive en casa. Dado el ritmo frenético de la vida de los humanos modernos, se puede entender por qué la gente toma fotografías de focas con tanta frecuencia. Pero tomar el mismo tipo de foto con estilo: mi gato en el sofá, mi gato en el alféizar de la ventana, se aburre rápidamente.
Para no abandonar la fotografía en absoluto, puede decidir experimentar. Por ejemplo, haz una sesión de fotos de moda para un gato, vistiéndola con ropa glamorosa o, en casos extremos, poniéndole medias sobre el gato.